SOLUM HONOREM
En el suelo no hay silencio
permanece el susurro de los pasos
la memoria de los gritos
las confidencias de las voces
lágrimas, risas, saludos...
luchando contra el olvido
del silencio duro de las piedras.
Las luces del día
iluminan y dibujan el suelo
marcando perfiles, texturas y relieves,
la noche extiende sombras
y tras ellas se esconde
escucha entonces los desvelos del miedo
aprende lo que desea la gente,
y es el más fiel destino
de nuestro torpe andar por el mundo,
pero cuando buscamos sueños
en la tímida luz del universo celeste
o en el vagar de las etéreas nubes
no pensamos nunca en el suelo
que ha sostenido los pasos
que nos han hecho tal y como somos
y que generoso, nos sostiene
dejando que la mirada busque en el cielo
los sueños, todos los sueños
que
como humanos nos pertenecen.