Cesta
0
0,00 €
Hay una parte del mar
que está en tierra
y solo cuando se embarca
respira, vive, siente, es y compite
empujado por velas blancas
a rumbos que aprovechan del viento
la dirección, la fuerza
con sus destrezas marineras,
hay una parte del mar
que a diario sobrevive en tierra
en espera, siempre en espera
de volver a estar en el agua
y navegar con arte, nobleza y maña
y ser parte del mar
como el velero lo es en regata.