Cesta
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Cada mañana
la puerta espera a que salgas
para entregarte ella, a la vida
para guardar ella, tu casa
sabe que la calle espera tus pies
la luz tus ojos, la mirada
el aire la respiración profunda
a bocanadas
para llenar los pulmones
de los mil aromas de la mañana
mientras la puerta
paciente y fiel aguarda
a que cuando regreses
la descubras impenetrable
en la distancia
esperando, paciente, aguarda
para entregarse dócilmente
al suave empuje que la abra
para dejarte entrar a casa
y cerrarse de nuevo
para que el mundo y sus problemas
se queden fuera.