Un lugar sin memoria 

Prefiero el recuerdo, siempre

que el olvido

el dolor es inevitable

y es el precio pagado

por haber vivido sin miedos

arriesgando y sabiendo que el riesgo

a pesar de los avisos

merece la pena

incluso, haberse equivocado

nada construye tanto el alma humana

como el dolor que no destruye

pero al contemplar, a veces

la inalcanzable inmensidad

dejo de pensar en todo y en nada

y por un instante habito

un lugar sin memoria...